El tratamiento de los Hilos tensores es un nuevo tratamiento de rejuvenecimiento facial para ayudar a combatir la flacidez de nuestro rostro y cuello. Los hilos utilizados son de sutura de polidioxanona, es un material médico que se utiliza en cirugía cardiaca y oftalmológica, es biocompatible con nuestro organismo y reabsorbible. Se infiltran en la dermis, creando una fibrosis y posterior formación de colágeno, con el que obtendremos una tensión y reafirmación en la piel.
Los efectos de los hilos son visibles a partir del primer mes, alcanzando su punto álgido a los tres meses del tratamiento, y durando aproximadamente entre 12 y 18 meses. La duración dependerá de la edad, del estado físico del paciente, de los hábitos y de sus características. Es importante tener en cuenta que los hilos no sustituyen al Lifting (cirugía), pero sus efectos preventivos y reparadores de la flacidez ayudan a retrasar el envejecimiento y a combatir los signos presentes.
El tratamiento de los Hilos tensores está indicado para todos aquellos pacientes que quieran obtener un efecto reafirmante en el rostro, para los primeros signos de flacidez, descolgamiento de la piel, pérdida de peso y pérdida del óvalo facial… Las zonas en las que se puede realizar el tratamiento son la frente, mejillas, mandibula y cuello.
Es posible que tras la infiltración aparezcan hematomas en la zona e inflamación que remitirá a los pocos días. De ser así, aplicar frio local y crema específica recomendada por el facultativo en la zona donde haya hematomas.
Tras la sesión el paciente puede reincorporarse a su vida normal de inmediato.
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